Las dos Coreas empiezan a preparar la reunión de familias separadas

Seúl.- Las dos Coreas intercambiaron este martes las listas de personas que desean ver a familiares que residen en el país vecino, con vistas a preparar las reuniones de familias separadas por la guerra que ambos países han acordado celebrar en agosto.

La Cruz Roja de Corea del Sur remitió al régimen norcoreano una lista de 250 surcoreanos que desean ver a familiares residiendo en el Norte y que resultaron separados por la Guerra de Corea (1950-1953), confirmó un portavoz de la organización a la agencia Yonhap, destacó Efe.

A partir de criterios como el estado de salud (la mayor parte de los solicitantes superan lo 70 años), estas 250 personas han sido elegidas a partir de una lista de 500 candidatos que había sido seleccionada aleatoriamente a partir de unas 57.000 solicitudes. La Cruz Roja norcoreana respondió a su vez enviando una lista de otras 200 personas que desean ver a familiares del Sur.

Ambos países deben trabajar ahora conjuntamente para localizar a los familiares de estos candidatos que residen al otro lado de la frontera y confirmar si quieren participar en las reuniones. Las dos Coreas, técnicamente aún en guerra, esperan poder tener finalizada una lista definitiva de 100 familias participantes para el próximo 25 de julio.

Estas 100 familias se reunirán en el turístico Monte Kumgang de Corea del Norte entre el 20 y el 26 de agosto. El presidente surcoreano, Moon Jae In, y el líder norcoreano, Kim Jong Un, preacordaron en su cumbre del pasado 27 de abril celebrar una reunión de familias separadas a mediados de agosto.

En esta histórica cita, vista como un importante acicate para la posterior cumbre que Kim celebró con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, los dos mandatarios coreanos se comprometieron a reforzar lazos y a trabajar para la "total desnuclearización de la península".

Esta será la primera reunión de familias desde octubre de 2015 y una muestra más del actual acercamiento entre Seúl y Pyongyang y del giro diplomático por el que ha apostado el régimen este año.