El plan del Gobierno para el turismo "no resuelve lo más urgente"

El pasado jueves, 18 de junio, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, presentó el tan ansiado plan de impulso para el sector turístico. El Ejecutivo anunció una inversión total de 4.250 millones que se dividirá de la siguiente manera:

  • 3.362 están destinados a medidas de apoyo a las empresas. 
    • 2.500 de ellos corresponden a una línea de aval del Instituto de Crédito Oficial (ICO).
    • 731 cubrirán la moratoria de 12 meses en los préstamos hipotecarios.
    • 106 a programas de "formación, capacitación y mentoring" para trabajadores
    • 25 se destinarán a incentivos como es el caso de la reducción de las tasas aeroportuarias.
    • En esta partida también se incluiría una moratoria de las cuotas de leasing de los autobuses de transporte discrecional, de la que se desconoce la cantidad.
  • 859 se invertirán en el desarrollo de un modelo turístico sostenible y digital.
  • 41,4 irán a otras medidas.
    • ​38,1 destinado a marketing y promoción.
    • 3,1 millones destinados a la creación de un nuevo observatorio de inteligencia turística.
    • 0,2 millones a recuperar la confianza.

Sánchez también comunicó que los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTEs) "están para quedarse", lo que, si bien puede indicar que se prolongarán tal y como han pedido en bloque desde el sector turístico, lo cierto es que es poco preciso y clarificador.

La reacción del sector turístico

A la presentación del citado plan, le han seguido las reacciones de las principales asociaciones de referencia de subsectores como el alojamiento, la hostelería y la aviación. La mayoría de ellos se han mostrado satisfechos con que el Gobierno por fin haya creado una estrategia concreta para una industria que genera el 12,6% del PIB y más del 14% del empleo, que ha sido, además, una de las más dañadas por el impacto de la pandemia del Covid-19. No obstante, y pese a que el plan "va en la dirección correcta" no todo son luces, puesto que no soluciona algunas de las demandas más acuciantes.

CEHAT

“Tenemos que felicitarnos porque el gobierno español haya puesto sobre la mesa un plan específico para el sector turístico en nuestro país”, ha aseverado Jorge Marichal, presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat). Marichal destaca que las medidas vienen a completar las “buenas” que se tomaron en el inicio de la pandemia como los ERTEs y las líneas ICO, claves para el mantenimiento de las empresas y el empleo. Ha celebrado especialmente que entre el paquete de medidas se haya incluido la carencia en la amortización del capital de las operaciones financieras e hipotecarias que caen sobre el sector

No obstante, se ha mostrado más duro en lo que respecta a la poca concreción con respecto a la prórroga de los ERTEs que, de por sí, "no sirven para el sector turístico": "Se equivoca el gobierno al no poner sobre la mesa una prolongación de los ERTEs de fuerza mayor flexibles". También ha echado en falta medidas para la incentivación de la demanda.

Exceltur

Desde la Alianza para la Excelencia Turística (Exceltur) resaltan que va en la buena dirección pero que al haber sido "algo apresurada su presentación" se han dejado muchos flecos abiertos. "Es una decepción que, a estas alturas, no estén todavía acordados los términos de la extensión de los ERTES en las condiciones imprescindibles, para evitar que lleguen despidos masivos o quiebras", recalcan.

Asimismo, desde el lobby acentúan que "ampliar a 2.500 millones los avales ICO, contra 83.000 millones de pérdidas de actividad, son medidas muy exiguas". Además, recuerdan que no se incluyen incentivos en el plan como la reducción/exoneración de impuestos como el IVA. También critican la ausencia de medidas para incentivar a corto plazo el consumo turístico interno, la tardanza para cerrar acuerdos bilaterales o generales (UE) para crear corredores turísticos y que no ofrece mecanismos alternativos a los bonos canjeables para evitar la pérdida de liquidez de las empresas turísticas, especialmente agencias y aerolíneas.

El vicepresidente de Exceltur, José Luis Zoreda, resumió su valoración sobre el plan asegurando que está bien encaminado pero "le falta munición por todos los lados para sujetar a un sector que está en caída libre".

Hostelería de España

La patronal de bares y restaurantes (Hostelería de España) se ha mostrado especialmente crítica y ha recriminado que la propuesta "no resuelve lo más urgente". "El Plan de Impulso al Sector Turístico no se entiende sin la extensión de los ERTEs por fuerza mayor hasta finales de año en el sector turístico", reclama su presidente, José Luis Yzuel. Además, inciden en que no se contemplan medidas de incentivo, como bonos para la reactivación del consumo nacional, como sí han hecho los principales países europeos con peso turístico: "Agradecemos el esfuerzo del Ejecutivo en la campaña de comunicación y publicidad para fomentar el turismo nacional que contempla el plan, pero la economía de los españoles se ha visto gravemente dañada con esta crisis y, sin ayudas económicas, el nivel de reactivación no va a ser suficiente".
 

Tampoco están satisfechos con las líneas de crédito y es que consideran que el sector necesita medidas financieras de rescate, como líneas específicas para pequeñas y medianas empresas y la creación de microcréditos de rápida concesión de 25.000 euros.

"A pesar de los recurrentes intentos de colaboración que hemos hecho desde el sector para trabajar conjuntamente en este plan con el Ejecutivo, nuestras peticiones no han sido contempladas", denuncian.

ALA

"Es un paso adelante, pero insuficiente, para impulsar al turismo", ha declarado la Asociación de Líneas Aéreas (ALA), que aglutina cerca de 80 aerolíneas que operan en España. Reciben con entusiasmo la reducción de las tasas aéreas por operaciones de aterrizaje, pero creen que es insuficiente. Solicitan ayudas adicionales que no estén condicionadas a la actividad de las compañías como es el caso de la bonificación tarifa de pasajeros.

Al igual que el resto de patronales, también ha insistido en que es vital la prolongación de los Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE).